Aclaración: Primero que nada, no quiero que este blog incite a nada más que a no cometer mis errores y alentarlos a cometer los suyos y aprender de ellos.
Yo soy Mary Jane Holland -en realidad no, es solo que prefiero mantener mi nombre en secreto, así como los de todos en mis relatos-, tengo 13 años y como muchos otros adolescentes, me corto.
(La historia de cómo empezó todo la voy a poner en otra entrada, para no mezclar los temas).
No soy perfecta... mejor dicho, estoy lejos de la perfección. Tengo sobrepeso, dientes chuecos y una joroba de camello en vez de nariz. Lo que más me molesta es mi sobrepeso, midiendo unos 163 cm. peso 64 kg. y, aunque no estoy obesa, sí me siento mal conmigo misma.
Resulta que cuando tenía unos 6 o 7 años, comía a escondidas. Aprovechaba cada momento a solas que tenía para comer. Cuando mi madre se iba al supermercado o a dormir la siesta, era mi momento de escabullirme a la cocina y comer lo que sea: galletitas, budín, papas fritas, facturas, chocolate y todo lo que tenía a mi alcance. Ahí fui ganando peso, cada grano de azúcar que entraba por mi boca se convertía en grasa corporal -como suele suceder-. Poco a poco fui controlándome, aunque para entonces, ya tenía varios kilos de mas y mi autoestima rozaba el piso.
Fui víctima de bullying los 6 años de escuela primaria -desde los 6 hasta los 12-. Se burlaban de mi por mi nariz y por mi peso, eso me destrozó. Me ponían apodos y no tenía el valor necesario para detenerlos. Las maestras no ayudaban mucho, les comentaba mi problema y sólo les daban una reprimenda, por lo tanto, al día siguiente volvían las burlas. Si mi autoestima rozaba el piso antes, en ese entonces ya estaba por el subsuelo. También solían molestarme por mis notas, siempre fui muy buena estudiante hasta tal punto de ser abanderada en los actos escolares. Supongo que al recibir tantas burlas, necesitaba destacar en algo, y realmente me gustaba destacarme en ello. El año pasado -2012, mi primer año de secundario en una escuela diferente- todo fue menos intenso, las burlas seguían pero no eran nada comparado a otros años. Los primeros días fueron algo complicados, me refiero a que estaba completamente sola, no hablaba con nadie por temor a ser rechazada, y cuando alguien me hablaba simplemente contestaba mal para que se fuera, no podía soportar mantener conversaciones con extraños. Mi estrategia era rechazar a los demás para no sentirme mal cuando ellos lo hicieran. Durante este año sufrí de constantes depresiones. Poco a poco fui haciendo amigos, hoy me llevo bien con casi todos mis compañeros, pero sigue siendo muy difícil mantener conversaciones con extraños, incluyendo a vendedores. Sí, me da pánico pedirles productos a los vendedores, pedir helado o pizza por teléfono, etc. aunque suene tonto, es algo que odio de mi misma.
Mis mejores amigas -llamémoslas Stefani, Elizabeth y Hayley- no tienen idea de mi problema, excepto Hayley, ella también lo hace, con ella siento que realmente puedo ser yo misma. Stefani y Elizabeth son mas "yo no sufro, nadie sufre" asique no entenderían mi situación.
Tuve un novio el año pasado. Cuando le conté de mis problemas, nos fuimos alejando y discutiendo cada vez más, hasta que decidimos terminar. Eso empeoró mi situación.
Las personas que me mantienen viva son Hayley, mi fiel amiga; Demi Lovato y Lady Gaga, mis modelos a seguir; y Carmen, mi amada abuela quien me crió hasta los 8 años.
Hace varios meses que como muy poco, trato de bajar de peso sin hacer actividad física y sin recurrir a mi ya superada enemiga, la bulimia. Pero eso es otro tema, la superé hace un mes o un poco más con ayuda de libros. Mis padres se quejan de mi poco apetito y ya tuve varios mareos y caídas -una de ellas en el baño, cayéndome y golpeándome con la bañera-, pero fuera de eso, estoy completamente bien.
Ésto soy yo, esto es Mary Jane Holland.
'Auto-mutiladora', ex-bulímica, depresiva, adolescente, humana.
